Un Ritornello Avandarico

En las peleas de box que la culta tele transmite, don Sonny Alarcón y el cada vez mas simpático árabe Andere, aparte de atropellar el lenguaje y servirse de expresiones de barriada, no impiden que sus micrófonos traguen y luego eructen por los radiorreceptores y telerreceptores del publico que esta fuera de la arena muchas lindezas, que van desde las palabrotas hogareñas hasta las mentadas en toda forma; proferidas por aficionados que rodean el cuadrilátero, sobre el cual un par de infelices se golpean y sangran. Hasta la fecha, ni al tal Alarcón ni al Andere, como tampoco a otros locutores ni a Lechuga ni al Loco Valdés ni a los Polivoces les han impuesto el menor castigo las alertas y castas autoridades. A los Polivoces, por cierto, la Lotería, entidad oficial que aparentemente se halla a cargo de programas de asistencia publica, no ha tenido empacho en proporcionar jugosos beneficios, aprovechándolos, sin el menor sentido de la decencia, en su propaganda. Nada han dicho al respecto las alertas y castas autoridades.
Tanto por radio como por tele se suceden chorrales de anuncios redactados y actuados en pocho, anuncios en que se pone como trapeador a nuestro idioma, anuncios dominados por el mal gusto... Mas he aquí que se celebra el festival Avandaro y, ¿qué sucede? Que las castas y alertas autoridades pegan un brinco y se horrorizan. Ni tardos ni perezosos, los funcionarios del apéndice burocrático llamado departamento de Radiofusión de la Dirección General de Educación Audiovisual, mando un tronante oficio a los locutores Felix Fuano y Agustín Meza de la Peña, de XERPM, Radio Juventud, mediante el cual los suspendió por 60 dias debido a que, según Audiovisual, violaron el articulo 63 de la ahora si muy respetada le Ley de Radio y Televisión: "Quedan prohibidas todas transmisiones que causen la corrupción del lenguaje y las contrarias a las buenas costumbres, ya sea mediante expresiones maliciosas, palabras o imágenes procaces, frases y escenas de doble sentido, apología de la violencia o del crimen..." Si desde hace tiempo se hubiera hecho caso de semejante ordenamiento, cuyo texto parece haber sido redactado por una beata, ya estarían en las Islas Marías (y tal perspectiva no es desagradable) Paco Malgesto, Angelito Fernández, etcétera. A Zulma Faiad, debido a que su lánguidos bailoteos exhibe con generoso comediamento sus lindas nalguitas, ya le habrian aplicado el 33. Y a los monopolizadores de la teve, que la atestan de violencia y crimen, ya los habrian colgado (ojala!).

Pero, no; no ha ocurrido nada parecido: los zares de la televisión mexicana prosiguen inundando los hogares de espantosas escenas en las que un hijo mata a su madre por robarle un porta bustos o un padre aporrea bestialmente a su hija porque le acabo la botella del champú o un gángster abre en canal al dueño de una lavandería chicaguense que le dejo torcido el cuello de una camisa o un marshall se escabecha a los diez ultimos pieles rojas que a Hollywood se le habían olvidado asesinar... Y el humorista de don Mauricio Kleiff mediante sus libretos; continua como si nada produciendo "expreciones maliciosas, palabras o imágenes procaces, frases y escenas de doble sentido", mientras sigue viento en popa por radio, tele y deversos medios de difusión la corrupción del lenguaje.

¡Ah, mas se presenta el festival de Avandaro y entonces si les truenan los huesos y les rechinan los dientes a las castas y alertas autoridades y de nuestros oídos cándidos! Se castiga con la suspensión por dos meses y con multa de 50 mil pesos a los locutores que tuvieron que ver con el festival de Avandaro, con el cuento de que pecaron al "iniciar a la niñez y a la juventud al uso de drogas, y permitir que sus entrevistados pronunciaran palabras procaces y ofensivas para la comunidad".
La censura no se detiene. Fue cancelado a la brava el concierto de musica pop del auditorio y se obligo a comparecer ---como si se tratara de delincuentes--- ante las mesas de la procuraduría a músicos onderos. ¿Por qué la suspensión del festival? Porque en el se tocaría música como la que se toco en Avandaro. ¿Por que los inquisidores oficiales llamaron a varios conjuntos a declarar? Porque estuvieron presentes en Avandaro. Pero todo esto implica un misterio y un misterio que, como tantos misterios, nadie en este país tiene la intención de aclarar.

En cuanto a ellas, a las autoridades castas y vigilantes, ¿qué juventud les complace? Seguramente, una juventud como aquella que representaba Pablo Rincón Gallardo, quien en un tete-a-tete con Quique Castillo Pesado le confió: " Uno de los momentos mas grandioso de mi vida fue cuando estuve invitado a una recepción en el palacio Buckingham y baile con la reina Isabel, que me pareció una mujer sencilla y encantadora". Jóvenes del tipo de Pablito, capaces de declarar como el, sencilla y encantadora a doña Chabela de Inglaterra y afirma, como el que uno de los momentos mas grandiosos se su vida ha sido el que dedico a bailar con la reina, son los jóvenes gratos a nuestra sociedades poblanas y corrompidas; a nuestras autoridades castas, alertas e inquisidoras; a la gran prensa hipócrita y chantajista, y, en fin. A todos los que no quieren que 1968 se quede en 1968 y claman porque 1968 sea eterno.

Cuando han castigado burócratas como el funcionario Raimundo Lopez Ortiz a jóvenes de la clase de Pablo Rincón Gallardo, cuando los han puesto en orden nuestras muy alertas y muy castas autoridades? ¿Por qué si se lanzan contra los de Avandaro? La respuesta es sencilla: porque los de Avandaro no son como aquellos otros y porque aquellos otros son, a fin de cuentas, miembros del sistema.

Ahora bien, por lo que mas se ha atacado a quienes asistieron al festival de rock es por las drogas que muchos consumieron. Tomando en cuenta lo anterior, las autoridades reaccionaron atacando no solamente a los jóvenes consumidores de tales drogas, si no a todos los jóvenes en general, pese a que lo que debieron haber hecho fue apuntar sus baterías contra los productores y traficantes de drogas. Y no hicieron esto. Porque aquellos jóvenes, los jóvenes de Avandaro, constituyen el blanco. Se les llama jipis, se les tilda de mugrosos, se ridiculizan sus melenas, se desacreditan sus ropas, se ataca a la música que les gusta... pero, en el fondo, contra quienes simple y llanamente se da la batalla es contra jóvenes.

Al mismo tiempo, las autoridades se enredan en grotescas contradicciones. Se habla de que, a cambio de festivales tipo Avandaro, los jóvenes deben reunirse para hacer ejercicios gimnásticos. Y entonces, a la carrera, las autoridades tratan de restaurar los escasos centros deportivos a los que pueden asistir los jóvenes. Obviamente, no bastan, tanto porque son pocos como porque los jóvenes no van a reunirse exclusivamente con la finalidad de hacer fibra. También los jóvenes, comenzando por los del DF debido a su numero, necesitan contar con lugares de reunión para platicar, divertirse, leer y, why not? oír música. ¿Por qué no han de oír música, la música que les gusta a los jóvenes del DF? ¿ Por que las autoridades, súbitamente preocupadas en arreglar centros deportivos, casi todos ellos vetustos, e invitar a plana entera en los diarios a los jóvenes, comentarios aquella imperdonable sangradora histérica de suspender, sin dar ninguna explicación, el festival de rock en el Auditorio (26 de septiembre), con todo y que se trataba ni mas ni menos que de una reunión juvenil?

El gobierno del Presidente Echeverria trata de atraerse a los jóvenes, dicen. Sin embargo, pesan los recuerdos de las matanzas y encarcelamientos de jóvenes, ocurridos en 1968 y, ya dentro de este sexenio, el 10 de Junio pasado. Pero creemos que el presidente todavía tiene tiempo de que tal intención se realice, siempre y cuando se limpie de censores antijuveniles, de sicarios enemigos de los jóvenes, de burócratas que prohíben barbas y melenas en distintas dependencias oficiales, de cerebros de piedra que abominan de la musica juvenil y de tiburones de la política que contituyen trampas para hacer que los jóvenes caigan en los rediles del sistema que rechazan.
Debe comprender el gobierno que no necesariamente todo los jovens tiene que ser pentatetlas, que una gran cantidad estan mas interesados en otras actividades que en las deportivas, y que entre ellos no son pocos ( a Avandaro fueron mas de 150 mil, remember) los que ante todo quieren oir musica. Otra medida torpemente negativa seria la de querer convertir en marionetas atleticas a los jóvenes y obligarlos a desempeñar menesteres tan bajos como levantar tablados durante los intermedios de juegos de fut en Estadio Azteca....
Si realmente el gobierno quiere atraerse a los jóvenes, instale parques destinados a los jóvenes (parques para deambular, leer, hablar o guardar silencio) y muchos centros culturales y recreativos juveniles ( con bibliotecas, discotecas, cafes, salas de conferencias, salas de teatro, cineclubs, etcétera). Encargue la vigilancia de tales sitios a los propios jóvenes. Por otra parte, si de veras el gobierno quiere que en el confien los jóvenes, escuchelos y atiéndalos. Pero a todo tipo de jóvenes, no tan solo a los de las porras oficiales.
De cualquier manera, sea que le guste o no le guste al sistema, los jóvenes van aprendiendo a vivir en un nuevo mundo, en el mundo nuevo de ellos.